Son productos de alta apetecibilidad que permiten conseguir conversiones muy reducidas y que tienen una gran digestibilidad, por lo que son especialmente indicados para las plantas de circuito cerrado, donde las heces y los restos de pienso no consumidos suponen un problema.

Una segunda línea es la de piensos en forma de harina, pensados para mezclarse con agua y aceite de pescado y elaborar gránulos semihúmedos. Están especialmente indicados en la adaptación a la alimentación de las anguilas salvajes y en la producción semiintensiva de anguilas grandes.

Dibaq cuenta con experiencia en los dos sistemas de producción para alimentos de anguilas e investigamos de forma continuada los aspectos nutricionales de esta interesante especie con el ánimo de obtener dietas que sean capaces de mejorar los resultados productivos.

•  Distribución: Sus estadios larvarios se distribuyen por el Atlántico Norte y por el Mar Mediterráneo y Mar Negro. Los adultos se encuentran en los ríos que desembocan en dichas zonas y, durante su viaje al área de puesta, en aguas profundas del Atlántico Norte.
•  Alimentación: En los ríos es carnívora y particularmente voraz, alimentándose de pequeños peces, moluscos, crustáceos y larvas de insectos acuáticos. Al alcanzar la madurez sexual dejan de alimentarse, realizando el viaje de regreso al Mar de los Sargazos a expensas de sus reservas grasas.
•  Pesca: La anguila se pesca con luces y grandes trueles. Las anguilas se capturan con nasas, caña y artes de arrastre.
•  Crianza: Consolidado en tanques y estanques.
•  Repro: Cuando maduran sexualmente (6-12 años los machos y 8-13 años las hembras) dejan el río a finales del invierno o en primavera y se desplazan al área de puesta (sargazos). Tras la puesta (a unos 600 m de profundidad) los adultos mueren. La larva inicia su migración (dura 2-3 años) siendo arrastrada por la Corriente del Golfo hacia las costas estuáricas europeas, transformándose en angulas que remontan los ríos y se convierten en anguilas.